Si hay una marca especializada en el cuidado de pies y piernas y con renombre en el mercado, esa es Dr Scholl, la marca que cuida tus pies de forma integral.
Los pies pasan toda nuestra vida con nosotros y son los responsables de que podamos caminar y desplazarnos de un lugar a otro. Sin embargo, muchas veces dejamos de lado sus cuidados y las consecuencias de ello, a la larga, pueden ser bastante graves.
¿Aún no conoces los productos de Dr. Scholl? Es una marca que surgió hace más de 100 años y que a día de hoy sigue estudiando a fondo los pies para mejorar nuestro confort ampliando y mejorando su línea de productos.
Recuerda que sin apenas darnos cuenta, cada día maltratamos a nuestros pies excediéndonos con el número de pasos, usando calzado inadecuado u olvidándonos de la importancia que tiene la tarea de hidratarlos y exfoliarlos.
Los pies constituyen el punto de apoyo esencial sobre el que descansa tu cuerpo por lo que Salunatur te da hoy unas pinceladas sobre la historia de Dr. Scholl y te desgrana los beneficios que te pueden aportar algunos de sus productos. ¡Cuídalos!
Dr Scholl, la marca que cuida tus pies de forma integral
El origen de la marca
La historia comenzó en 1899 en Chicago cuando William Mathias Scholl se mudó a la ciudad y comenzó a trabajar en una zapatería especializada en calzado cómodo. Tras un tiempo allí y observar que el dolor de pies suponía un gran problema para todos los clientes que allí acudían, se embarcó en el estudio de la Medicina y se centró en el análisis de la anatomía del pie.
¿Y después? Cuando ya por fin se convirtió en doctor, patentó su primer invento, una plantilla que se colocaba en el interior del calzado y sujetaba el arco del pie y así es como pudo comprobar que había que seguir avanzando en ese camino.
Actualmente, podemos encontrar plantillas de Dr. Scholl especiales para cada tipo de calzado como las de uso diario tanto para hombre como para mujer, las deportivas o las especiales para zapatos de fiesta como los tacones.
El desarrollo
En 1912, Mathias Scholl fundó Illinois College of Chiropody and Orthopaedics y año más tarde se convirtió en la institución más importante de Estados Unidos en el estudio del pie.
Después, tras la inmersión completa en este ámbito, el doctor decidió que el siguiente problema en el que se centraría sería el de las piernas cansadas y con varices por lo que en los años 20 creó la línea de medias de compresión para aliviar estos dolores.
En los 60 llegaron las sandalias anatómicas convirtiéndose en un icono de estilo y de confort y a finales de esta década, Dr. Scholl falleció.
Dr Scholl en la actualidad
A pesar de que ya Dr. Sholl no estaba, el mensaje y el empeño que tuvo por el cuidado de los pies se trasladó a la perfección a toda la compañía y, por ende, continuaron sus pasos y llegó la nueva generación de los productos de Dr. Scholl.
Todos sabemos que ir a un podólogo supone tiempo y dinero por lo que hay una serie de productos que pueden ayudarte a cuidar la salud de tus pies desde casa. Algunos de los favoritos por los clientes de Salunatur son los siguientes:
– Sérum intenso: La piel de los pies también se deshidrata y gracias a este producto pueden recobrar el equilibrio de hidratación que necesitan de forma casi inmediata.
– Crema para durezas: Los callos y las durezas suponen uno de los principales motivos de consulta en el podólogo por lo que es importante tener a mano en casa un producto que ayude a reducirlas en una semana.
– La lima electrónica Velvet Smooth: Los datos hablan por sí solos y sabiendo que casi el 50% de los españoles tiene la piel de los pies endurecida y por ello es normal el éxito que ha conseguido esta pequeña herramienta que puede ser usada por todos los miembros de la familia. Su batería dura 90 minutos y viene equipada con un cabezal cuya vida útil puede alargarse hasta 9 meses.
¿Qué te parece la historia de Dr. Scholl? Si quieres cuidar tus pies como se merecen, Salunatur te recomienda que acudas a productos como los que acabas de descubrir. Han sido diseñados y fabricados por expertos en el pie y cuentan con todas las garantías. Ante problemas más importantes, acude a tu podólogo al menos una vez al año para hacerte una revisión.